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domingo, 27 de julio de 2008

La esquina de Parkinson y Alzheimer

Ni siquiera sé si están bien escritas esas calles y a qué altura de convergen pero parecen que la confusión que vivimos los bachilleres o técnicos también la sufren los doctores. Cuando uno está bien tiembla de frío o miedo, cuando está mal se le rebelan los nervios y comienza a moverse sin que exista una causa externa. Parece que en el Alzheimer es igual y con otros agregados más.. Hace semanas que me susurran en el oido que aquello que parecía Parkinson en realidad es Alzheimer y no tengo ganas de torturarme leyendo 1000 páginas de Internet. Me resisto. Igual me susurran que seguro es Alzheimer lo que creíamos que era Parkinson. Los más osados y entusiastas, -quizá lo más piadosos- dicen que seguro la culpable de los olvidos, las confusiones y alucionaciones no es otra cosa que la medicación. Y te cuentan la historia de un abuelo, un tío o un vecino al que le cambiaron la medicación y el tipo emergió de ese vahído de confusión y espanto como si saliera del agua y regresó a la normalidad. La normalidad la perdimos hace unos tres o cuatro meses, casi al mismo tiempo que comenzaba el conflicto con el campo. Comenzó por ser una sensación de angustia en el pecho, no querer salir de la casa, llorar todo el tiempo y temor a quedarse sola. Fue dejando de cocinar, lavar, cambiarse hasta que lentamente fue superando algunas de sus imposibilidades cuando vino lo peor: la confusión y la pérdida lenta pero contundentemente de el manejo de las cosas más simple. Como si estuviera desaprendiendo todo lo que fue aprendiendo en la vida. Comenzó por perder la habilidad cotidiana y mecánica casi refleja que se adquiere con el tiempo. Por eso no pudo lavar más. El agua caliente no estó donde debe estar y finalmente en por cuál de las dos canillas sale el agua caliente. La C o la F, ya no indican nada. Como las horas... Ingenuamente le preparé un estuche de plástico con compartimientos donde se colocan las pastillas que debe tomar durante el día... Un día me encontré gritándole que debía tomar las pastillas a las cuatro, a las cuatro de la tarde, a las 16... Y ella pidiéndome por favor que se lo anotara, y cuando lo hacía no sabía que quería decir 4 ó 16. Ya no le queda espacio para en su cabeza para grabar memoria. No hay cosas nuevas si no un permanente presente donde la oscuridad en la ventana puede indicar cualquier cosa. Otra cosa es el espacio. Hace días que me pregunta a quién se le ocurrió ubicarla en un lugar igual a su casa. Ella cree que le construyeron ese espacio para experimentar con ella... "Pero si es tu casa", insisto. Y ella se enoja porque cree que la confundo... y como prueba esgrime: "la cocina es más grande, aunque la heladera la cambiaron de lugar". Otro día me preguntó: "quién hizo ésto parecido a casa: el Pami o es un lugar Peronista". Estuve tentado a decirle que era una obra peronista porque sé que ese dato la hubiese calmado. Mi madre siempre sintió que todas las cosas que hizo Perón, le dieron felicidad y la protegieron... Supongo que la comparación a mi viejo no le gustó nunca, si alguna vez él llegó a darse cuenta, pero ella siempre pensó que mi viejo fue algo así como el reemplazo de Perón. Se casaron en el 55. La Iglesia donde se iban a casar la incendieron. Así que mi mamá perdió a Perón en el mismo momento que se ganaba a mi viejo. Cuando comenzaron las alucinaciones empezó a confundirme con mi papá. Cada vez que me llamaba como él, la retaba y la corregía. Ella no me creía. Venía y me corría el pelo para ver si encontraba una cicatriz que tengo detrás de una oreja; sólo así comprobaba que era su hijo y no su esposo. Hace una semana comenzó a poner tres cubiertos en la mesa, señal que también come mi viejo y hoy al mediodía puso cuatro. Le pregunté quién más venía a comer y me contestó: "La ví a mamá que andá por aquí; ya sé no me corrijas, sé que hace como diez años que se emurió, pero por cualquier cosa le pongo cubiertos, porque por ahí quiere comer". Ay...cada situación es graciosa y terriblemente triste. Es mi madre y se está perdiendo su memoria en un niebla que sólo espero siempre la acompañe alguno de esos seres que ella tanto quiso. Mientras tanto yo me siento parado en la esquina de esas dos calles que no llevan a ningún lado. Esperando.

jueves, 24 de julio de 2008

Bombita Rodríguez, el "Palito Ortega" Montonero


Si Bombita Rodríguez hubiera manejado el asunto del campo, seguro, las cosas se arreglaban más rápido. Me parece que los postmontoneros como Moreno y el Presidente, les atrasa el reloj histórico o ¿alguien puede creer que es cierto el apasionamiento de pedazo de boludo de más de 50 años, gritando y saltando futbolísticamente porque llegás con tus guardaespaldas y empleados del ministerio a la Plaza de Mayo, acompañado por la Policía Federal? Si hubiesen vivido el 73 como dios manda no te quedan ganas de hacer tanto espamento. Es como esos boludos que no vivieron a su debido tiempo las cosas: de viejos terminan haciendo el ridículo.